«David Bowie is» ha situado el Museo del Diseño en el mapa
Xavi Roig es el responsable del Departamento de Comunicación del Museo del Diseño. Conversamos con él sobre los diferentes caminos para comunicar el diseño a través de canales on-line y off-line.
Has vivido la fusión de los cuatro grandes museos que dieron lugar al Museo del Diseño en la plaza de Les Glòries. ¿Qué reto ha supuesto comunicar este cambio?
La inauguración del Museo del Diseño en la plaza de Les Glòries ha representado la oportunidad de dar a conocer un nuevo espacio cultural de la ciudad y de redescubrir una gran colección bajo un denominador común: el objeto.
¿Y qué acciones habéis tenido que trabajar?
Para comunicar este cambio creamos una nueva identidad corporativa y una nueva web y se realizó una campaña de comunicación que siguió una estrategia dirigida tanto a los ciudadanos que conocían los cuatro museos como al público nacional e internacional.
En el primer caso, teníamos que dar a conocer los beneficios del cambio, como la nueva museografía y la creación de un espacio para la reflexión del papel que tiene el diseño hoy en día. Con el público nacional e internacional tuvimos que potenciar el mensaje de ser uno de los pocos museos del mundo que concentra, en un único espacio, piezas de diseño de producto, diseño gráfico y diseño de moda junto con piezas de artes decorativas, artes textiles y de indumentaria y artes gráficas.
En los últimos meses se han vivido con gran intensidad dos grandes exposiciones: «David Bowie is» y «Adolf Loos. Espacios privados». ¿Qué destacarías en lo que a comunicación respecta?
La exposición «David Bowie is» ha ayudado, indiscutiblemente, a ubicar el Museo del Diseño en el mapa internacional de los museos y en el de la oferta cultural de la ciudad. Con la exposición sobre Loos hemos podido realizar acciones con entidades afines a la arquitectura, ya que es un personaje muy conocido en este sector: el resultado ha sido muy positivo y ya es una de las exposiciones más visitadas de la historia del Museo.
Hablemos de futuro. ¿Cuáles son los retos que estáis planteando desde el área de comunicación del museo?
Uno de los objetivos a corto plazo es la visualización de nuestras colecciones, ya sea a través de los propios canales digitales o colaborando con plataformas digitales ya existentes. Empezamos a ver ya los primeros resultados en Europeana y Google Arts & Culture, a la que nos adherimos el año pasado con el proyecto We wear culture.
Por último, en tu día a día seguro que estás en contacto con muchos de los diseñadores y muchas de las creaciones de diseño gráfico, de producto o de artes decorativas presentes en el Museo. ¿Cuál es tu pieza favorita de la colección?
El hecho de que el Museo tenga un fondo tan amplio y variado (cerca de 70.000 objetos y 22.000 documentos) hace que constantemente descubra piezas sorprendentes. Por decir algunas: la colección de vidrio catalán del siglo XVII; el diseño del packaging de Gelocatil, de Enric Huguet (impresionante ver cómo ha sobrevivido al paso del tiempo); y los maravillosos catálogos de los vestidos de Paul Poiret del Centro de Documentación del Museo.